En mis épocas de adolescencia el porno era un boom y a su vez el tabú de tabúes. Claro, el sexo como algo muy expuesto y prohibido. Sin embargo el porno es vigente, es algo que encuentras en cualquier tipo de página, con la diferencia que esta es una película repetitiva donde siempre habrá una misma acción de múltiples formas.
En el mundo webcam, “complacer” es la palabra preferida, a los usuarios les gusta sentirse escuchados, sobre todo cuando tienen peticiones y quieren que se les complazca y se les haga realidad lo que tienen en su mente. Es como teletransportarlos al sexo a su manera. Esto ya marca una gran diferencia con las películas de porno, esto es sexo en vivo y en directo, casi personal. En Casa ADD me han dejado claro estos puntos de vista, son realmente importantes no caer en el error de repetir un show como si estuvieras actuando todo el tiempo el mismo papel, la versatilidad en un pvt marca la diferencia en un show en donde se entrega el placer de mil formas pedidas.
De las fantasías a la acción
Alguna vez he visto películas de porno, ¡son monótonas! No voy a negar que logran prender las ganas de tener sexo. Me gusta mencionar este tema porque de esta forma puedo tratar de meterme en las mentes de los user, a través de mis percepciones y vivencias. Es importante saber conectar con cada uno, porque créanme, complacer no es fácil, hay que tener cierto grado de sutileza, pasión, y estar dispuesta a cumplir fantasías.
En Casa ADD, me han pasado muchas cosas que son experiencias, hay una que la recuerdo con mucha emoción, hubo un usuario llamado Mark, antes de entrar a privado me preguntaba cosas por free chat, no hablamos mucho tiempo por ahí, solo bastó que le respondiera que si me gustaba tener sexo con ropa y de una entro a privado, era curiosa su petición, yo solo pensaba dejarme llevar. Mark, me comentó que la mayoría de su tiempo lo dedicaba a buscar videos con personas teniendo sexo con ropa, y era difícil ya que todos quieren estar desnudos. Cuando encontraba algo que él quería, no lo complacía totalmente y por esta razón estuvo en mi sala pvt.
Después de contarme su experiencia, me pidió estar todo el tiempo con mi atuendo puesto, es más, que si era posible me vistiera con más ropa, y así lo hice. Esto fue aumentando el deseo de Mark, luego me ordenó que me acariciara por encima de la ropa, que me amara a mí misma, porque él lo estaba haciendo. Prácticamente todo el tiempo que estuvimos a solas fueron caricias por encima de la ropa y palabras románticas, la verdad es que Mark fue un tipo muy divertido con su propuesta y a su vez todo un galán por su trato respetuoso hacia mí. Por eso creo que este ha sido uno de tantos privados emocionantes y uno que me dejó claro que el porno, en realidad, no llega a suplir los deseos más candentes de los user.
Sexo a la carta
La diversidad de usuarios que llega a mi sala son muchos, todos con peticiones diferentes, algunas pueden sonar fuertes, inocentes, y muy divertidas. En las lista de deseos, hay una parte que se especifica lo que estoy dispuesta hacer por ellos, de esta forma conectamos bien en un privado. A ellos les gusta ser realmente escuchados y complacidos, la verdad es muy importante, y además Casa ADD va muy de la mano con hacernos sentir seguras y empoderadas en las trasmisiones, si no sé algo, o me siento insegura en algún tema, le pregunto a mi monitor, y esta vez fue una de esas preguntas sueltas: ¿en qué se diferencia una actriz porno de una modelo webcam? El moni me respondió que viendo porno nunca se van a sentir escuchados, solo están viendo algo por un momento y se puede llegar a volver aburridor porque no pueden ir más allá, mientas con la modelo webcam se siente escuchados e interactúan, piden cositas, de esta forma sienten que sí se acercan a sus fantasías.
Es chévere saber diferenciar este tipo de asuntos… Sexo a la carta es provocativo para un usuario ambicioso, que quiere complacer y ser complacido. El porno quizás sea cosa del pasado…